El surf es un deporte muy antiguo y sus orígenes no están demasiado claros. Lo que si se sabe es que el surf no comenzó como una actividad lúdica o como deporte. Hay relatos que cuentan que los antiguos pescadores de Perú, pescaban en sus embarcaciones llamadas Caballito de Toroa, estás estaban diseñadas para estar de pie.
Aunque nadie sabe seguro cuando y dónde se inicia el Surf, se tiene conocimiento que en las Islas Sanwich (Hawaii), en las que desembarcó James Cook en 1.778, pudo observar que los nativos vivían y estaban obsesionados con la práctica de este deporte esta es una de las primeras referencias escritas sobre el surf. Se sabe también que en el Norte de Perú, las culturas locales dejaron indicios que muestran a hombres remontando las olas en artilugios que pueden ser los precursores de las actuales tablas de surf. Existen cerámicas pre-incaicas que avalan esta teoría (Huacos) y en alguna de ellas se muestran hombres sobre maderos o algo similar deslizándose sobre las olas, seguramente lo anterior al Caballito de Toroa. Esto seguramente indica que el surf en sus primeras formas pudo haberse iniciado en esta zona de América del Sur.
Además también “se dice” que el origen del surf en la polinesia está directamente relacionado con los Peruanos ya que existen relieves del siglo XIII hallados en Perú que refuerzan la teoría que estos grandes navegantes preincaicos pudieron llegar hasta la polinesia por sus grandes conocimientos de navegación. Aunque también existen indicios que postulan que los polinesios pudieron llegar también a las costas de américa del sur puesto que existen cráneos encontrados en la Isla Mocha con la típica forma polinesia pentagonal del cráneo y por la forma de la mandíbula. Así como la existencia de diversas palabras descriptivas precisamente de técnicas de navegación de probable origen polinésico en la lengua mapuche y la construcción de balsas selladas similares a las polinésicas, y muy distintas a las balsas de paja inca, entre los pueblos australes de Chile. En cualquier caso lo que parece prácticamente seguro es que entre las dos culturas hubo algún tipo de relación.
No obstante fueron los polinesios en su necesidad de hacer constantes travesías entre las islas los que algunos siglos más tarde , extenderían la costumbre de deslizarse sobre las olas hasta lugares como Hawaii. De lo que no cabe duda es que durante siglos, el antiguo deporte del “he’e nalu” (hawaii- he’e: agua que corre, nalu: onda, ola) fue practicado y perfeccionado por el pueblo hawaiano, es interesante saber que el surf se consideraba que era una prueba de gran valor la acción de surfear las grandes masas de agua del archipiélago y que también servía para la resolución de disputas (esto puede significar el comienzo del surf como deporte).
Los Hawaianos le daban tanta importancia al surf que disponían de una palabra, hopupu, que indicaba un estado de ánimo de emoción intensa que se siente respecto a alguna acción. Existe también un manuscrito Hawaiano, que dice que durante el mes de Noviembre o mes de los temporales los hawaianos se volvían particularmente hopupu, algo parecido a lo que nos pasa a los de la costa Cantábrica en los meses de Septiembre a Noviembre estamos “super hopupu :)”
Cómo se hacían las primeras tablas de surf
Algo que me parece de mucho interés también es la veneración a la que se llegaba en Hawaii por el surf que empezaba incluso antes de diseñar la tabla y de lo cual seguramente tengamos mucho que aprender. El primero de los puntos que debemos saber es el del árbol adecuado que utilizaban para la construcción, solamente eran válidas tres especies de árbol: el Wiliwili, el Ulu y el Koa. Cuando el árbol era seleccionado, el maestro constructor utilizaba un hacha de piedra, hacía con ésta un agujero entre las raíces del árbol e introducía en este un pescado, mientras, rezaba una oración como ofrenda a los dioses por el árbol que iba a utilizar para la construcción de la tabla de surf . Tras ese ritual, se cortaba el tronco con el hacha de piedra y se tallaba en las dimensiones deseadas por el que iba a ser su propietario. Cuando el tronco tenía las dimensiones deseadas, se llevaba a la playa y se finalizaba dentro del lugar donde se guardaban las canoas para la pesca. Se pulìa, con el fin de dar un aspecto delicado y facilitar el deslizamiento en el agua, con una especie de coral granulado llamado pohaku puna y con una piedra tosca llamada oahi.
Se finalizaba el proceso frotando la tabla con la raiz del árbol empleado para la construcción, y se usaba para dar color oscuro, que también protegía la tabla, se empleaba también carbón de leña de pandanus o los jugos de plátanos sin madurar. L puntilla era la aplicación de un aceite de nuez kukui, para impermeabilizar, una vez que este aceite secaba la tabla de surf estaba lista para ser utilizada.
Según lo escrito, los orígenes del surf se remontan al año 1778. Aunque nadie sabe con exactitud cuando y dónde se originó el Surf, se tiene conocimiento que en las Islas Sanwich (Hawaii), en las que desembarcó James Cook en 1.778, pudo observar que los nativos vivían y estaban obsesionados con la práctica de este deporte. Se sabe también que en el Norte de Perú, las culturas locales dejaron indicios que muestran a hombres remontando las olas en artilugios que pueden ser los precursores de las actuales tablas de surf. Existen cerámicas pre-incaicas que avalan esta teoría (Huacos) y en alguna de ellas se muestran hombres sobre maderos o algo similar deslizándose sobre las olas, seguramente lo anterior al Caballito de Toroa. Esto seguramente indica que el surf en sus primeras formas pudo haberse iniciado en esta zona de América del Sur.
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